Cómo hacer calçots al horno: una deliciosa receta tradicional

Tabla de contenidos

Los calçots son una verdadera delicia típica de la cocina catalana. Estas cebollas tiernas y alargadas son famosas por su sabor y textura únicos, y por ser el ingrediente principal de la famosa calçotada, una fiesta gastronómica muy popular en Cataluña. Si quieres disfrutar de estos exquisitos vegetales en casa, te enseñaremos cómo hacer calçots al horno, de una manera sencilla y deliciosa. ¡Prepárate para sorprender a tus invitados con esta receta tradicional!

Ingredientes:

  • Calçots (calcots) frescos
  • Sal al gusto
  • Salsa romesco

Preparación:

Paso 1: Comprar los calçots

Lo primero que debes hacer es adquirir los calçots frescos. Asegúrate de elegir aquellos que estén en buen estado, sin manchas ni daños. La temporada de calçots va desde noviembre hasta abril, por lo que te será más fácil conseguirlos en ese período. Para una calçotada estándar, calcula entre 200 y 250 gramos por persona.

Paso 2: Limpieza de los calçots

Una vez que tengas los calçots en casa, es momento de limpiarlos adecuadamente. Retira las primeras capas externas y córtalas, eliminando las partes más dañadas. Luego, con un cuchillo afilado, corta las raíces, dejando alrededor de 3 cm de tallo. Lávalos bien para eliminar la tierra y los restos de suciedad.

Paso 3: Precalentar el horno

Prepara el horno precalentándolo a una temperatura de 200 grados Celsius (395 grados Fahrenheit) durante 10 minutos. Mientras tanto, puedes ir preparando una bandeja de horno con un poco de papel de aluminio para facilitar la limpieza posterior.

Paso 4: Asar los calçots

Una vez que el horno esté precalentado, coloca los calçots en la bandeja de horno, asegurándote de que no estén apretados y que haya espacio entre ellos. Sazona con sal abundante. Luego, introduce la bandeja en el horno y deja que los calçots se aseen durante aproximadamente 30 minutos.

Paso 5: Lista la salsa romesco

Mientras los calçots se están asando en el horno, aprovecha para preparar la deliciosa salsa romesco, que es el acompañamiento tradicional de los calçots. Puedes encontrar diversas recetas de salsa romesco en línea, pero básicamente lleva ingredientes como tomates, pimientos, almendras, ajo y aceite de oliva.

Paso 6: Servir y comer los calçots

Una vez que los calçots estén dorados y blandos, retíralos del horno y sírvelos inmediatamente en una bandeja grande. Tradicionalmente, se presentan en tejas, que son placas de barro especiales para calçotadas. Acompaña los calçots con la salsa romesco y ten a mano servilletas, ya que comerlos de forma tradicional puede ser un poco "sucio". Para comerlos, tienes que agarrar el calçot por el tallo y, con un movimiento rápido, quitarle las capas externas chamuscadas hasta llegar al centro tierno. Finalmente, sumerge el calçot en la salsa y llévalo a la boca.

Conclusión

Los calçots al horno son un verdadero manjar que debes probar. Esta receta tradicional catalana se ha convertido en un plato icónico de la cocina de la región y es perfecta para compartir con amigos y familiares en una calçotada. Sigue estos sencillos pasos y disfruta del sabor y la textura únicos de los calçots al horno. ¡Buen provecho!

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